“Salir a tomar un café o una pinta también es mucho más barato. Mientras que en Inglaterra siempre pensaba: ‘¿Esto me va a arruinar?’ Aquí puedo conseguir un café por una libra (1,2 €) y una pinta por 2,50 libras (3 €)“, revela la joven.

“Es cierto que el tipo impositivo es más alto en España, pero en general la calidad y el nivel de vida son mucho más altos”, agrega.

Holly Cope sólo paga 74 libras al mes (87 euros) en gastos de seguridad social. Después de dos años, esta cifra aumentará a unas 260 libras esterlinas (300 euros).

Aparte de esto, a pesar de gastar más de 2.000 libras (2.350 euros) para obtener una Visa de Nómada Digital, que se supone que deja a las personas pagando el 15% del impuesto sobre la renta, Holly Cope dice que en realidad paga el 21% de impuesto sobre la renta, que es más alto que en el Reino Unido.

Además de esto, en España la cantidad libre de impuestos es de 4.700 libras esterlinas (5.500 euros), menos de la mitad de las 12.500 libras esterlinas (14.500 euros) del Reino Unido.

Aunque se siente “defraudada” por su situación fiscal, esto no ha disuadido a Holly Cope, que habla español y se enamoró del país cuando era adolescente. Después de pasar un año enseñando inglés en España en 2015, siempre tuvo la ambición de regresar permanentemente.

No se arrepiente de la mudanza, pero admite que la situación fiscal es complicada y que podría considerar mudarse nuevamente en el futuro a causa de ello.

“Si me quedaré en España para siempre es una pregunta difícil de responder”, dijo. “Sería un equilibrio entre mi cabeza y mi corazón. Consideraría mirar Gibraltar o mirar otras visas alrededor del mundo y pensaría cuál es la más eficiente desde el punto de vista fiscal”, concluye.